
El amigo
Larry Page acaba de tener su bautismo de fuego al comunicar sus primeros resultados trimestrales como nuevo CEO de
Google, y aunque parezca mentira, hay luces y "sombras" (con comillas dobles, porque no hay triples). Las luces son los 8.580 millones de dólares en ingresos conseguidos durante los tres primeros meses de 2011; un 27% más que durante el mismo periodo del año pasado. Las sombras, que los analistas de Wall Street estaban esperando un poquito más, dado que los gastos de adquisición de tráfico fueron de 2.040 millones de dólares, dejando los ingresos reales en "sólo" 6.540 millones.
Sustraídos gastos (ahí irían los casi 2.000 nuevos empleados que se sumaron a la compañía este trimestre), los ingresos netos de Google fueron de 2.300 millones de dólares, lo que representa un "pequeño" incremento con respecto a los 1.960 millones de dólares del año pasado.
Si quieres darte un atracón de números, tienes el informe financiero completo en el enlace de lectura.