Los mayores temores se han confirmado: Donald Trump, actual presidente de los EEUU, ha sacado a su país del Acuerdo climático de París con todo lo que esto conlleva, asegurando que es "un mal acuerdo para los estadounidenses". Trump, que gobierna el segundo país junto a China que más emisiones nocivas produce del mundo, ha decidido desvincularse de este proyecto firmado en 2016 que busca un consenso y trabajo conjunto internacional para reducir las emisiones de gases que provocan el llamado efecto invernadero (GEI).
Bien es sabido que el presidente no cree en este fenómeno y siempre ha minimizado las horribles consecuencias que se dicen que puede llegar a tener en nuestro planeta -de hecho, ya las estamos viendo- la emisión descontrolada de estos gases. Era por tanto de esperar que Trump tomara esta postura tras haberse reunido hace unos días en la cumbre de los países del G-7 en Taormina (Italia).
Algunos han llegado a decir que es mejor que el presidente haya tomado esta decisión, para quitarse de encima a un país que lo único que iba a hacer es poner pegas y problemas, pero lo cierto es que esta decisión traerá consigo una indeseable consecuencia: que EEUU no se comprometa a reducir sus emisiones en los porcentajes que Obama, anterior presidente del país, estableció durante su mandato. El esfuerzo conjunto del resto de países -entre los que se encuentra hasta la mismísima Corea del Norte- sería por tanto mucho menor, al tener que luchar contra el segundo mayor emisor de gases de CO2 del mundo.
Muchas compañías estadounidenses se unieron para pedir en conjunto a Trump que no saliera del acuerdo, con la presencia en la lista de muchas empresas tecnológicas como Apple, Microsoft o Google, por citar algunas de las más grandes dentro del sector. El mismísimo Elon Musk, hasta ahora consejero del presidente, anunció ayer, como ya te contamos, que en caso de desvincularse del acuerdo, abandonaría su cargo.
Actualización: Se está apuntando que la decisión de Trump tiene como objetivo una renegociación de su participación en el acuerdo y que en todo caso, su salida no será efectiva hasta un día después de las nuevas elecciones de presidencia de los EEUU en el año 2020. En cuanto a lo primero, Alemania, Italia y Francia ya han emitido un comunicado oficial señalando que no hay opción de una renegociación. En cuanto a la segunda posibilidad, en esta cuenta de Twitter (@nanisimo) se indica que las cosas no son tan rápidas e inmediatas, por lo que una vuelta del país a la lista llevaría varios meses.